La Quiropráctica y el dolor
¿Por qué duele?
La mayor parte del tiempo el dolor es realmente útil e informativo, permite saber que algo no está funcionando bien y es una experiencia benéfica. Pero a veces se vuelve crónico o permanece sin motivo, en esos casos puede que ocurra una actividad espontánea del cerebro, lo que explica porque después de haberse sometido a todo tipo de estudios de la zona dolorida no se encuentra nada. Pero el dolor sigue presente…
De la misma manera, la actividad espontánea del dolor puede ser la explicación para el conocido «dolor fantasma» percibido por soldados o accidentados que pierden un miembro de su cuerpo y sienten dolor en esa zona meses después de su amputación.
Es un poco como la alarma de un coche que dispara sin que haya nadie forzando la puerta. El mecanismo interno del coche que mantiene la alarma quieta y preparada para actuar en caso necesario está descontrolado. La alarma funciona pero el mecanismo de «inhibición» está fallando, lo mismo ocurre en su sistema nervioso.
Muchos de ustedes se preguntarán a qué corresponde una actividad espontánea del cerebro?
«Muchos de nosotros cuidamos mejor nuestros automóviles que nuestros cuerpos … pero el auto tiene partes reemplazables». – B.J Palmer
Los científicos que estudiaron el efecto del ajuste quiropráctico en la columna vertébral han descubierto que modifica instantáneamente la función del cerebro.
El beneficio de su efecto se observa sobre todo en la región cerebral llamada corteza prefrontal aquella región está íntimamente relacionada con la cronicidad del dolor. En otros términos, el cuidado quiropráctico puede prevenir que un dolor se vuelva crónico.
También se ha evidenciado que el tratamiento quiropráctico permite la disminución de la sensación de dolor ayudando el sistema nervioso a «apagar» el dolor, un poco como un interruptor apaga una bombilla.
https://www.alexianequiropractica.es/la-quiropractica-tiene-base-cientifica-demostrable/
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